Tearmoon Teikoku Monogatari (La historia del Imperio Tearmoon)

Animada por: Silver Link (Sasaki to Pī-chan, Dosanko Gal wa Namara Menkoi, Maō Gakuin no Futekigōsha, Etc)-  
Emitida en: 2023 —-  
Demográficos: Josei – Shoujo   —-  
Géneros:  Kigeki  —-  
Calificación del Oji-san: 6.49 — ☆☆☆ 3 de 5-  
Episodios y Ovas: 12 Episodios —

Tearmoon Teikoku Monogatari es, sin dudas ni apelaciones, un animé del montón. Ya lo he dicho, no necesariamente eso significa que el animé sea malo, simplemente es un animé que logra entretener, pero no más.

La historia es interesante en su primer parte y entretenida en su segunda parte; pero en general es sencilla y sin pretensiones. Tiene un personaje principal que se echa la historia al hombro sin ningún problema y personajes secundarios que ayudan cuando es necesario. Pero repito, no esperen grandes emociones ni sonoras carcajadas, porque de eso no hay mucho.

Pero quiero dejar algo muy claro; este animé está muy, pero muy lejos de ser malo o aburrido.

Este es un animé hecho para mujeres adultas, tanto la novela ligera como el manga eran de género josei, y el animé sigue la misma línea. Y esto es lo que les gusta a las mujeres adultas, historias sencillas y poco pretensiosas, con protagonistas conectadas a tierra pero graciosas; y siempre con un chorrito de romance. Y seamos sinceros, a los hombres adultos nos gustan menos, pero aún así nos entretienen.

No es para adolescentes varones, eso si.

Tearmoon Teikoku Monogatari es lo que sucede cuando un estudio bueno toma un proyecto con presupuesto ridículamente bajo. Hacen una visual aceptable, le meten pasta a los actores y hacen una buena musicalización. A excepción de un par de escenas donde usaron trucos muy viejos de animación barata, Tearmoon Teikoku Monogatari es lo que se espera de un estudio excelente como Silver Link.

La historia es simple.

El animé empieza cuando la Princesa Mia de unos 20 años, heredera del Imperio Tearmoon se ve envuelta en la revuelta que destronaría a su familia; siendo ella misma y su actitud despreciable, una de las causas por las cuales se da la revuelta, apoyada e inspirada por reinos menores vecinos, cansados de la tiranía de los Tearmoon (Mia entre ellos). Pasarán muchos meses en cárcel antes de que la princesa sea ejecutada en la guillotina. En esos meses Mia entiende, y vive en carne propia, las realidades de la miseria humana, y a las que su familia sometió al pueblo; también entiende su propia persona odiosa; todo ello a través del hambre, la humillación y alguna que otra tortura.

Durante ese tiempo solo tuvo la empatía de alguno que otro sirviente, principalmente Anne, la más torpe y humillada de sus sirvientas, la que más debió odiarla fue la única que le mostró algo de compañía y compasión. Su único consuelo fue un diario que escribió en cárcel contando todo lo vivido.

Al caer su cabeza en la guillotina Mia se despierta de nuevo en su cuerpo, 8 años antes. Pocos meses antes de que empezaran las situaciones que causaron que el feliz y próspero imperio decayera rápidamente hasta desencadenar una revolución cuando ella tuviera 20 años. Así, Mía vuelve a tener 12 años, y una nueva oportunidad de salvar a su reino; con las únicas armas de su experiencia de todos los sufrimientos y la madurez de una mujer de 20 años, y su diario ensangrentado como guía.

Tearmoon Teikoku Monogatari es la historia de Mia, de cómo gracias a su madurez, a la humildad aprendida en cautiverio y al diario, emprende su lucha. Acompañada por Ludwig, un funcionario de rango medio pero brillante, y por Anne, igualmente medio idiota y torpe, pero absolutamente devota a su ama.

Vendrán las luchas para controlar preventivamente las desgracias futuras; vendrá la lucha por tener una buena relación con sus compañeros de colegio, nobles de otros reinos que en su vida anterior gustosos apoyaron la revolución que derrocaría a la insoportable princesa que conocieron.

Pero la principal lucha es contra su propia estupidez. Vamos, todos somos estúpidos; algunos tienen largos momentos de lucidez (las personas que llamamos genios), pero la mayoría somos estúpidos de tiempo completo. Mia es adulta, tiene experiencia, la ayuda de personas brillantes y esforzadas que la acompañan, y sobre todo es la reina de los malos entendidos; así es como sobrevive sus propias ocurrencias, y como buena suertuda, siempre cae de pie.

Ella es la historia, no solo es Mia la que mueve la historia, sino que la historia gira alrededor de ella; este es un animé donde los personajes secundarios nunca pasan de ser secundarios. Y para ser más exacto, es Mia el personaje principal, la que salva la historia de ser un desastre; y fue Uesaka Sumire, la responsable de Mia.

Y con ello vamos a lo técnico.

Las voces y el trabajo de dirección son lo que salvaron este animé del desastre. Bueno, eso es una exageración gorda, más bien debería decir que fueron los que arrancaron a Tearmoon Teikoku Monogatari de las garras del aburrimiento. La historia es interesante, pero es la decisión del director (Abe Yushii) lo que le da ritmo a la historia, y lo que le permite pasar de una primer parte, predecible, pero muy interesante; a una segunda parte más floja argumentalmente pero más entretenida.

Luego viene el elenco. Mia la actúa Sumire Uesaka, una de las grandes estrellas de los últimos 10 años, no tanto por sus papeles principales, que tiene suficientes, sino porque Suminyan (su apodo más común, aparte de VVV -Violence Violet Vodka- remanente de su papel como Dekomori) tiene fama de ser militar; llega 10 minutos antes que todos, con el papel aprendido de memoria, y el de sus colegas también; con el manga o la novela ligera original aprendida, y nunca se distrae hasta que termina la grabación. Se dice que no hay seiyuu más enfocada que Suminyan. Solo una actriz así puede hacer lo que hizo Sumire con Mia; y si ha eso le sumamos que a su alrededor habían actrices y actores, en papeles secundarios, de altísima calidad como Horie-kun, Naobo-chan o Rieri, la presión por ser perfecta era inmensa. Y la chica respondió a como todos esperaban, se sacó del culo una de las mejores actuaciones que ha hecho en su carrera.

Siempre lo he dicho, los estudios grandes saben hacer series baratas como nadie; y ellos saben que no importa el costo, si tienes un buen elenco, aunque la historia y lo demás sea malo, la serie no será mala.

Y no es que la visual fuera mala, no, ni mucho menos. Simplemente fue barata. Silver Link echó mano a todos los trucos, desde los fondos repetitivos hasta el paneo; le mordió al presupuesto un segundo acá y diez frames allá, con tal de pagar uno o dos animadores clave para Mia, un par de artistas para los fondos y segundos planos, y pagar a los seiyuus.

Y bueno, además de darle el opening a Sumire, lo cual subió su salario, pero sale más barato que contratar a una cantante para que haga el ending; además que Sumire misma es cantante comercial… vamos, la chica es todo una tarento.

Sumari: No, no es una imperdible; pero a cualquier adulto se la recomiendo sin importar género. Y también la recomiendo a todas las chicas adolescentes, que se van a reír como tontas.